Fecas en las duchas, olor nauseabundo en la cocina y el riesgo de contraer enfermedades infecciosas conforman la triste realidad que enfrentan hoy los vecinos de la Villa “Madrid Osorio”, de San Bernardo. Producto de las fallas en un sistema de alcantarillado obsoleto, 192 familias y sus casas deben lidiar con el colapso de tuberías, cámaras y el respectivo pago del servicio a Aguas Andinas cada vez que se presenta el problema. “Esta semana han venido tres veces”, precisó una vecina afectada.
Pues bien, el vecindario ha trabajado en soluciones y que, en palabras del presidente de la Junta de Vecinos, Armando Quinteros, tiene que ver con un proyecto de modernización y reparación que cuesta $600 millones. “Mi casa tiene una cámara que recibe la descarga de cuatro casas, y la del vecino le recibe a cuatro casas más, entonces no da la capacidad. Hemos revisado el tramado y nos encontramos con una cañería de 110 mm. que debe soportar los desechos de 24 casas en sólo 85 metros. Y es molesto, desagradable y peligroso, porque me debo levantar a las 4 de la madrugada a ventilar la casa porque el mal olor no se soporta, y ni imaginar cómo viven esta situación los adultos mayores que viven acá. La caca sale por nuestras cocinas”, precisó Quinteros.
Esta problemática se arrastra desde el 2011, cuando Armando Quinteros redactó un documento titulado “Proyecto Alcantarillado y Agua Potable” que fue firmado por los vecinos y presentado ante el municipio. En él se detalla el problema y la solución que, para los afectados, es el cambio total del tramado de aguas servidas. En 2014 el entonces director de Secpla, Roberto Fernández, respondió un oficio a la JJ.VV. que informaba que el departamento estaba gestionando la solicitud de orden de compra para efectuar la licitación del estudio de ingeniería para la instalación de la matriz de agua potable y alcantarillado para el sector.
Ejecutado el estudio, el municipio lo presentó al Gobierno Regional para lograr los recursos. “La alcaldesa, que nos ha apoyado, les mandó incluso el dictamen de la Contraloría General de la República que determina que nuestro condominio de viviendas sociales sí debe recibir asistencia y apoyo del Estado, algo que el Gobierno Regional desestima. Ojalá salga la aprobación y así llamar a la propuesta pública para tener una solución lo más rápida posible”, agregó el dirigente.
Al cierre de esta edición, y cuando esta crónica se acercaba a su punto final, Armando Quinteros y los vecinos sufrían otro colapso del alcantarillado para lidiar nuevamente con el mal olor y la probabilidad de contraer enfermedades infecciosas producto de los desechos.
Así viven 192 familias en la villa “Madrid Osorio”, de San Bernardo.
DELH