La tranquilidad de La Estancilla de Nos se ha visto alterada las últimas semanas por las fiestas clandestinas que, prohibidas por la cuarentena producto de la pandemia, se desarrollan en la ribera norte del Río Maipo. Los vecinos han tenido que enfrentar inescrupulosos que ocupan el camino principal para vulnerar el toque de queda sanitario e instalar parrillas, trago y música hasta la madrugada. Ha tanto llega el malestar, que la comunidad ha tenido que llegar hasta los golpes y piedrazos para defender su calidad de vida.
Al respecto, el presidente de la JJ.VV., Franco Orellana, narró a El Amanecer de Lo Herrera que “varios fines de semana se vienen generando fiestas clandestinas en el sector, y había una en particular que se realizaba justo aquí en el sector ya que la otra se realiza en el camino que va por la ladera del río. Entonces, los vecinos se organizaron para ver el problema de las fiestas, y llego un punto en donde las cosas se ‘calentaron’ un poco. De hecho, el fin de semana pasado carabineros llegó por llamados de la gente y les hicieron una ‘encerrona’, claro que solo les sacaron un parte lo que genero un descontento entre la comunidad”.
“Se tomó la decisión entre vecinos y algunos particulares de cerrar los caminos para evitar el ingreso de los vehículos y fiesteros, que también dejan basura, parrillas y bancas. Al alcalde se le enviaron los registros de anoche”, completó el dirigente. Y la acción tuvo resultado ya que a las 15 horas el edil Christopher White, en compañía del jefe de seguridad municipal, Eduardo Nuñez, visitará la zona para tomar medidas y evitar que los hechos se repitan.
DELH