SAN BERNARDO.- Tal cual estaba dispuesto, ayer se realizó la reunión entre el alcalde de San Bernardo, Christopher White, y el dueño de la Inmobiliaria del Valle SPA, Mauricio Truan, para llegar a un acuerdo por el arriendo del Gimnasio Ferroviario, hoy de su propiedad.
El cónclave se gestó el jueves pasado luego de que la empresa tomará control del recinto de calle Bulnes 654 al ejecutar una orden judicial de lanzamiento. En la vereda quedaban los enseres de la directiva de la directiva de la Unión de Ferroviarios Jubilados y Montepiadas del ex Consejo Maestranza Central de San Bernardo, liderada por su presidente Germán Tapia.
Con la palabra empeñada por parte de Truan y los ferroviarios (firmaron un acta), permitiendo que las pertenencias regresarán al interior del recinto deportivo (pero los socios no pueden ocupar las oficinas), la cita en el municipio debería zanjar el futuro inmediato del gimnasio.
Y el humo que salió no fue blanco, más bien gris. El alcalde White no quiso recibir a los medios de comunicación apostados a las afueras de su oficina, siendo el dueño de la inmobiliaria el encargado de entregar algo de claridad.
“No hubo acuerdo, pero el alcalde tiene toda la intención de arrendar el gimnasio para que se mantenga al servicio de la comunidad. Sin embargo, aclaró que no depende de él, que debe verlo con el concejo y luego de todo lo del juicio en curso quede aclarado y zanjado. Mi intención es que el municipio me lo arriende o compre”, dijo Truan.
Por último, Truan aclaró que no tiene problemas en que los enseres de los ferroviarios se mantengan en el pasillo de ingreso del Gimnasio Ferroviario, pero reiteró que no pueden ocupar las oficinas.
El “Ferro” es una estructura de 2.923 m2 construida sobre un terreno de 2.204 m2, cuyo valor comercial alcanza los $1.864.002.800 (aprox.). Un valor muy por encima de los $375.000.000 que Inmobiliaria del Valle SPA pagó a la Unión de Trabajadores Ferroviarios de Chile (UTFCH) por el histórico recinto.