SAN BERNARDO.- “Muchos me preguntan qué pasará cuando volvamos a clases y les respondo que no sé, que no tengo respuestas ya que también me siento insegura. Me levanto a las 5 de la mañana para llegar acá a las 8, pero no puedo decir que llego a un lugar que me da confianza y seguridad. Hoy no sé qué pensar de mi liceo, me da mucha desconfianza, pena y amargura, porque sé que estos hechos pueden volver a pasar”.
La intervención de Catalina Rosas, la presidenta del Centro de Alumnos del Liceo Industrial “Miguel Aylwin Gajardo”, fue una daga al corazón para los asistentes a la reunión ampliada convocada por las autoridades, para analizar los hechos delictuales del viernes pasado, donde alumnos protagonizaron un tiroteo en el exterior del recinto educacional, terminando herido un asistente social con arma blanca (hoy se recupera de las lesiones).
“La confianza se está perdiendo y la muestra es que hay compañeros que se irán del liceo. Sienten miedo de que les pase lo mismo, sienten miedo de pensar si terminarán o no heridos cuando vengan a clases”, agregó la presidenta, flanqueada en todo momento por su directiva. Hablo de Olivia Araya, secretaria; Cristóbal Medina, tesorero; Daniel Rivas, delegado de Infraestructura; Bastián Ahumada, delegado de Deportes; y Baltazar Bucarey y Víctor Veloso, del comité de Bienestar.
“Acá estudió mi hermano y me lo presentaron como uno de los mejores liceos para estudiar. Y lo consideraba como mi lugar seguro, donde no tendría que vivir todo esto. Y quiero que todos sientan este colegio como su zona de confort, donde puedan llegar y decir que acá no me ocurrirá nada”, completó.
Sentados en la testera, escucharon atentos a Catalina el alcalde de San Bernardo, Christopher White, el director de Educación de la comuna, David Rojas; la seremi de Educación, Flavia Fiabane; el jefe de División Gestión Territorial de la Subsecretaría Prevención del Delito, Adolfo González; el Delegado Presidencial Provincial, Miguel Ángel Rojas; el comisario de la 14ª comisaría de Carabineros, capitán Marco Antonio Morales; el comisario de la PDI, Ariel Ramírez; el director del liceo Waldo Campos; el Colegio Comunal de Profesores, representado por Miriam Cid, y los concejales Marcelo Sepúlveda Mariela Araya, Roberto Soto, Romina Baeza y Karina Leyton.
Tras el planteamiento de puntos de vistas de rigor, la seremi de Educación Flavia Fiabane, tomó la palabra y, con la misma fuerza de Catalina, precisó que “no están solos, porque estamos acá buscando una solución y todos tenemos que colocar algo para encontrarla. Pero lo más importante es que no sientan que están solos”.
MIEDO POR DECIDIR
En esta misma línea, el director del liceo industrial, Waldo Campos, comentó a El Amanecer de Lo Herrera que “debemos tener estrategias para la seguridad de funcionarios y estudiantes, y se invitó a todos los presentes a instalar una mesa de trabajo para buscar soluciones que nos permitan estar en paz. También se presentaron las necesidades del establecimiento y se comprometieron mejoras en talleres, articulación con entidades como Senda Previene, OPD y ampliar la oferta municipal de acompañamiento al estudiantado y cuerpo docente”.
Respecto del futuro académico de los estudiantes involucrados en el tiroteo, considerando que el alcalde White declaró que apoyará la idea de su expulsión, Campos precisó que “existen protocolos y leyes que este director respetará, ya que hay una investigación en este momento. Luego de 5 días hábiles debo resolver, por lo que estamos intranquilos y asustados por las decisiones que debemos tomar”.
