La crisis social y económica generada por la pandemia del Coronavirus ha provocado una cadena solidaria en varios sectores de San Bernardo. Recolección de alimentos, ollas comunes, entrega de remedios, gas e implementos de aseo son ejemplos de un esfuerzo encomiable.
Y la tarea ha sido dura, cómo no. Atender el llamado del necesitado, asistir en forma oportuna para evitar el hambre y entregar una palabra de aliento en medio de la cuarentena son tareas que dirigentes sociales, juntas de vecinos, corporaciones, fundaciones, municipio, empresas, autoridades y concejales se han esforzado en desarrollar.
Y justamente de los concejales de San Bernardo hablaremos en esta oportunidad. Con escasas posibilidades de ocupar espacios en los matinales de la televisión chilena, a diferencia de actores políticos que desfilan a diario entregando recetas mágicas con soluciones, los representantes locales acumulan en sus oficinas solicitudes de vecinos buscando ayuda.
Por ejemplo, Amparo García (UDI) ha tenido manos en las redes municipales y la alcaldesa Nora Cuevas, “atendiendo llamados especialmente de los adultos mayores, donde he trabajado permanentemente. También he podido coordinar una red de tejedoras con el fin de generar contención emocional y solidaridad. Me han donado lana muchas personas para confeccionar una mantita que iremos entregando a los enfermos y abuelitos en este invierno”.
Por su parte, Leonel Cádiz (PS) ha circulado por supermercados mayoristas para armar bolsas básicas con harina, azúcar, aceite, etc., “y repartirlas cada semana a los adultos mayores que están solos, familias con padres cesantes y personas que viven del autoempleo y no han podido trabajar. La verdad, de los años ‘80 que no veía tanta necesidad”.
MEDICAMENTOS
En tanto, Ricardo Rencoret (UDI) viene colocando su granito de arena “orientando y canalizado las dudas según corresponda a los distintos estamentos municipales, como Dideco, asistentes sociales, corporación de salud y oficina del adulto mayor, etc. En cuanto a ayuda material, gracias a aportes de amigos y colaboradores se armó una red de apoyo con cajas de mercadería, balones de gas y medicamentos. La ayuda les ha llegado a adultos mayores, personas que no han podido trabajar por la cuarentena y otras familias que se han quedado sin trabajo. Hemos intentado cubrir varios sectores de la comuna”.
La concejala Soledad Pérez (PPD), al igual que sus pares, ha canalizado la ayuda a través del whatsapp, celular, videollamadas e incluso un auto “para que le vayan a dejar a vecinos necesitados mercadería, insumos, leche, pañales, comida de perros, alimentos no perecibles, ropita de bebé, verduras, mascarillas y alcohol gel. También tengo contacto con dos comedores que están haciendo comidas para vecinos, y gente en situación de calle en sectores como Carelmapu, Andes 1 y 3, Yerbas Buenas, El Olivo, Los Morros y Gran Avenida, entre otros. También he asesorado a los vecinos en denuncias e información para la ficha de protecciónsocial”.
La independiente Jovanka Collao también se ha movilizado para “recolectar productos a través de amigos y familia, y aportando en ollas comunes que se han realizado en distintos sectores, alcanzando una cantidad de 80 familias. También realizamos un grupo informativo con pymes de la comuna que se han visto directamente afectadas, y charlas vía zoom con la Seremi del Trabajo Denisse Madrid para dar conocer temas como la protección del empleo y previsión social”.
“Hemos canalizado solicitudes de los vecinos hacia la Dirección de la Corporación de Salud, tales como apoyo a enfermos Covi-19, hospitalización domiciliaria, entrega de medicamentos, solicitud de horas médicas de urgencia y de vacunas a personas en situación de discapacidad”, agregó.
OLLAS Y FICHAS
El concejal Roberto Soto (PS) vive la crisis social desde su oficina, “donde realizamos orientación telefónica para actualizar el Registro Social de Hogares e Ingreso Familiar de Emergencia, entre otras materias. También orientamos y vinculamos a los vecinos con los diferentes programas de ayuda social impulsados por el municipio. A pesar de las restricciones de desplazamiento también estamos en terreno, comprometidos con la gente entregando implementos de seguridad y aportando a diferentes comedores sociales y ollas comunes en sectores como El Olivo, Lo Herrera, Barrio Oriente, Santa Ana y Ducaud”.
“Es necesario destacar la ayuda solidaria de decenas de comedores sociales, liderados por dirigentes, que han sido más efectivos que la ayuda institucional. Estamos viviendo una crisis muy excepcional y se necesitan medidas igualmente excepcionales”, agregó Soto.
En otra vereda, Javier Gaete (RD) precisó que “toda solicitud de ayuda social que llega a nuestra oficina es derivada a la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco), sabiendo que lamentablemente el municipio como eslabón de la cadena del Estado no da a basto para dar respuesta a todas las solicitudes de ayuda, puesto que es una gran masa de personas que hoy están desempleadas o con sus actividades laborales detenidas”.
Por último, Luis Navarro (PR) sostiene que “el cargo de concejal tiene bastantes limitaciones, pero aún así se han realizado las gestiones para que desde el municipio se pueda generar un plan de acción de ayuda y rescate con los que están en una condición de alta vulnerabilidad”.
DELH
